Imágenes
de octubre de 2017.
Puede
que el falso búho real que cuelga de una tirolina del techo del Teatro Romano no se
aburra observando a los visitantes y sobre todo a los inquietos
gatos, pero lo que está claro es que como espantapájaros es
innecesario.
Detalle. |
¿Qué
se supone que debe ahuyentar? Los felinos ya se encargan de espantar
a cualquier animalillo, alado o no, que ose acercarse.
En la calle Pedro Joaquín Soler, junto a la iglesia. |
Quizá
él y sus poleas formen parte de algún espectáculo teatral.
Vide
etiam el espantapájaros poetiano en Perched, and sat, and nothing more.
· · ·
No hay comentarios:
Publicar un comentario